El desfile tuvo lugar en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de La Laguna, situada en el Campus Guajara. Indudablemente, un marco incomparable para una velada fascinante.
Mujeres rompedoras y con ganas de comerse el mundo tomaron el salón de exposiciones de la citada ubicación para mostrar a Tenerife y al mundo la última colección del modisto procedente del norte de la Isla.
Las clásicas formas de la marca como las espaldas descubiertas o los volúmenes en faldas dieron paso a faldas midi, despampanantes escotes y transparencias. Todo ello, sin abandonar los tejidos clásicos (gasas, brocados o sedas). Además, Sedomir Rodríguez innovó con el paño en abrigos, el micado en prendas inferiores y la poli-piel, marcando una nueva línea dentro de la tradicional.
Los grandes protagonistas de la noche fueron, sin lugar a dudas, los vestidos joya. Embelleciendo cada centímetro del cuerpo femenino mediante faldas voluminosas, encajes dorados y aplicaciones en pedrería. Estructuras y cortes rectos y limpios bajo una paleta cromática que da paso a tonos más rompedores como el berenjena, petróleo, blanco, ocre, verde botella o teja, sin dejar de lado el elegante e imprescindible negro.
Fotografía: Sergio Trujillo
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