ARSC

jueves, 27 de febrero de 2014

Mi hermana

"Una hermana sirve para que escuches lo que nadie se atreve a decirte. Para compararte en lo bueno y en lo malo. Para que ejercites tu paciencia cuando te coge algo prestado sin permiso. Para recordarte cómo fuiste a su edad o para hacerte una idea de cómo quieres ser a la suya. Para dejarte ropa. Para echarte en cara cosas tontas y criticarte donde más te duele cuando menos te lo esperas. Para animarte un domingo compartiendo cualquier película de Disney con palomitas. Para tomarte el pelo diciéndote que eres adoptada y te encontraron en el cubo de la basura. Para conducir con alguien la primera semana de carné cuando tu madre aún le teme y tu padre se pone nervioso. Para darte cuenta de que la vida no hubiera sido igual de divertida si no hubiera nacido. Para todo". 
No importa todo lo que pusiera en la entrada de aquel blog que compartí contigo hace ya algunos meses. Sorprendentemente, numerosas cosas coincidían, pero puedo asegurarte que nada puede expresar cuánto eres en mi vida. Sé que no compartimos muchas palabras y las dos tenemos secretos que la otra desconoce. Sin embargo, siempre fuiste y serás un ejemplo a seguir. Te admiro, aunque no me creas y no te lo diga. Perdón, por las veces que he fallado, que no han sido pocas. Todo ello y mucho más, hace que te quiera, eso nunca lo dudes. Podrá pasar el tiempo y que estas palabras, al igual que las demás queden guardadas, pero nunca cambiará todo lo que pienso sobre ti. Gracias por compartir la misma sangre. Mi eterno agradecimiento por estar ahí. 
Ya sabes, desde la cuna y hasta las canas. 

Felices 20, BB.
ARSC.
Primer parte: Blog: The Little Pleaschhures, Revista Vogue: "Para qué sirve una hermana".

2 comentarios:

  1. Muy bonito. Hay que expresar los sentimientos: ¡Siempre unidas!.
    Os quiero

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mil gracias, Inmi. Por encima de cualquier cosa, os quiero muchísimo.

      Eliminar