Que no hay un sitio donde yo esté más a gusto, que
durmiendo en tu ombligo.
Me gusta imaginar como poder parar ese reloj que no para
de hacer tic tac para poder congelar el tiempo aquí a tu
lado y empiezo a recorrer ese mapa de tu piel y hay
tantas fuentes que en todas quiero beber porque no quiero
perderme un sorbo de tu cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario